Con mi hermana Eva

Aceleré mi movimiento de lengua y tuvo otro orgasmo, me levanté e introduje mi polla de un empujón. Empecé a meterla y sacarla rápidamente, solo quería follar, follar y correrme dentro de mi hermana, me estaba haciendo gozar como un loco, allí estaba yo, borracho, desnudo, encima de mi hermana que también estaba desnuda y los dos follando como locos y muriéndonos de placer.

Era una tarde de junio, hacía mucho calor, mi cuerpo estaba empapado en sudor y el ambiente sofocante hacía que cada músculo tardara en responder a las órdenes de mi cerebro. La tarde parecía que iba a pasar lenta y aburrida. Yo, un chico de 24 años, un sábado por la tarde en junio y sin tener ni un solo plan… Decidí quedar con algunos amigos, hice varias llamadas y nadie podía quedar, la gente tenía que estudiar para los exámenes finales de junio y no había mucho tiempo para divertirse. Decidí ir al cine, de esa manera se podrían pasar 3 o 4 horas más rápidas estando entretenido.

Cuando iba a salir de casa, preparado para una tarde aburrida intentando matar el tiempo con una película que ni siquiera me apetecía ver, llega a casa Eva, mi hermana, mi hermana tiene 18 años, es una chica muy guapa, 1″69, 53 kg, una talla 90 de pecho, piernas bien formadas, morena ojos verdes… Cualquier chico es capaz de perder la cabeza por una chica así, no? El caso es que mi hermana me preguntó donde iba, le comenté mi plan y me preguntó si podía acompañarme debido a que ella tampoco tenía planes. Yo le respondí que no había ningún problema, al fin y al cabo, por lo menos podría tener algún tipo de conversación y así se haría la tarde más amena.

Antes de ir al cine pasamos por un bar a tomar un café. Así pudimos hablar un ratito de varios temas sin importancia. Me comentó que hacía poco que había cortado con su novio, un tal Jaime con el que había estado saliendo durante algunas semanas. Yo ya hacía 3 meses que no tenía ninguna relación, normalmente las relaciones no me duraban más de 3 meses.

Después de unos 45 minutos hablando fuimos al cine, ella escogió la película, una de esas de amor que normalmente les gustan a las chicas. La película se me hizo bastante pesada, pero a mi hermana le gustaba y me yo me sentía bien sabiendo que ella era feliz.

Entré el bar y el cine empezó a hacerse tarde y decidimos ir a cenar fuera, la invité a un “chino”, seguimos hablando mientras cenábamos y entre varios tipos de conversación, como no, salió el sexo. Me comentó la falta de experiencia de los chicos de su edad, lo poco que sabían tratar a las mujeres y sobre todo, el gran defecto de los chicos, se corren muy rápido. Eva me dijo que había perdido su virginidad con un novio que tuvo durante 5 meses y después de haber follado el muy cabrón la dejó por otra chica de 19 años. Yo le comenté que había perdido mi virginidad con 18 años, y que desde ese día había mantenido varias relaciones con diferentes chicas y que siempre había tenido una gran actividad sexual hasta hace tres meses, que últimamente no había tenido mucha suerte.

Al salir de la cena nos fuimos a una discoteca para poder acabar la noche juntos, realmente lo estábamos pasando muy bien, solamente entrar empezaron a acercarse un montón de chicos, uno a uno para ver si ella quería bailar con ellos. Ella siempre respondía lo mismo: Tengo novio y viene conmigo, mientras me señalaba a mí. Yo sonreía y hacía ver que era su novio pasándole el brazo por los hombros para que no la molestaran.

Estuvimos bebiendo, bailando, riendo, lo estuvimos pasando muy bien. En la discoteca ponían música de todo tipo, desde música lenta, pop, rap, máquina y algo de house. Eva bailaba muy bien, Además, ese día iba vestida bastante sexy. Llevaba una falda corta de color negra, con una raja en el lateral, una camisa blanca que se quito y dejo ver un top de color negro que llevaba debajo, llevaba también unas botas no muy altas y el pelo suelto. En realidad estaba muy, muy guapa, no se si fue por los cubatas que me había bebido pero incluso a mi, su hermano, me estaba resultando difícil no mirar a Eva y ver a una chica que estaba buenísima. Llevábamos unas 2 horas bailando, eran las 3:30 de la mañana y la discoteca estaba llena de gente. Los chicos se estaban haciendo insoportables para eva y ella se me acercó y me pidió que la abrazara para ver si veían que iba acompañada y la dejaban en paz. Yo la abracé y empezamos a bailar pegados, era una canción lenta. Parece ser que el plan de Eva funcionó porque mientras bailábamos juntos nadie se acercó a molestarla.

Estábamos muy pegados, ella estaba muy sexy y yo llevaba un par de cubatas de más en el cuerpo. El caso es que mi polla empezó a reaccionar. A mi me dio bastante vergüenza e intenté separarme un poco para que no lo notara, pero como se suele decir, esas cosas las chicas siempre lo notan. Eva me miró a la cara, me sonrió y me dijo: No te emociones que lo de que eres mi novio es solo una broma, se puso a reír, me guiñó un ojo, me dio un beso en la mejilla y se fue a bailar otra vez sola. Yo me puse muy colorado, no sabía como reaccionar y decidí salir un rato a la calle a tomar el aire.

Estuve pensando durante 20 minutos y llegué a la conclusión de que si se me había puesto la polla tiesa era por el calor sofocante de dentro de la discoteca y por lo que había bebido. Si, mi hermana estaba muy buena, pero era eso, mi hermana. Al cabo de los 20 minutos Eva salió también de la discoteca, me preguntó si quería que nos fuéramos a casa y yo le dije que mejor sería irnos. Habíamos ido en coche, teníamos una buena caminata hasta llegar a el. Mientras andábamos por la calle no había ni una sola persona debido a la hora que era. Eva se me agarró del brazo. Íbamos los dos callados, yo me sentía un poco avergonzado por lo que había pasado dentro de la discoteca y no me atrevía a mencionar palabra, solo deseaba llegar al coche y irme a casa.

De repente Eva me dijo: -Allí dentro, ¿se te ha puesto dura por mí? -¡Pues claro que no!, ¿pero que estás diciendo? ¿Tú estás loca o que? -No se, es que me lo ha parecido, por como me mirabas….

-Mira niña, deja de decir tonterías que me parece que has bebido demasiado.

Eva volvió a reírse como en el incidente de la discoteca, eso hizo que yo me enfadara. Eva me dijo que no me preocupase, que no pasaba nada, que no se lo había tomado a mal. El hecho de que Eva estuviese diciendo que me había calentado por ella me enfadaba, a pesar de que en realidad yo pensaba para mi que ella tenía razón.

Llegamos al coche y el camino de vuelta lo hicimos callados, tardamos un poco en llegar a casa debido a que yo no quise correr mucho para que la policía no me parara y me hicieran la prueba del alcoholemia. Al llegar a casa me fui directamente a la ducha. Nuestros padres no estaban, los fines de semana acostumbraban a ir a una casa que teníamos en el campo. Me di una ducha de unos 40 minutos, eso hizo que me relajara, salí de la ducha y me dirigí a mi habitación. Al pasar por delante de la habitación de Eva, tenía la puerta un poco entreabierta. Ella se había acostado ya, al parecer se había duchado en el lavabo que tenía en su habitación y al acostarse únicamente se había puesto un camisón de color blanco. El camisón era muy cortito y con la luz que entraba a través de la puerta se veía lo suficiente como para ver que no tapaba mucho, además, como hacía tanto calor no tenía sábanas encima. Me quedé un par de minutos mirando como dormía y instintivamente entré y me acerqué para poder verla mejor, en ese momento ella abrió los ojos y me dijo:

-¡Te pillé!… ¡Me estabas mirando! -¿Estás tonta? Solo había entrado para coger un par de CD para escuchar en mi habitación porque no tengo sueño. Eva volvió a reírse y me dijo: -Eres un salido, soy tu hermana y te pongo cachondo -¡Vete a la mierda! En ese momento salí de su habitación rápido y di un portazo. Entré en mi habitación y me estiré en la cama, mi corazón latía a 1000 por hora, me había pillado mirándola y le había puesto una excusa que no me creía ni yo.

Pasados unos 10 minutos escuché como se abría la puerta de su habitación, yo rápido cerré la luz de la mía y me metí en la cama para hacerme el dormido. Eva entró en mi habitación y se sentó en la cama junto a mí y me dijo:

-Anda, no seas tonto y vamos a hablar que no pasa nada. Yo no respondí pero ella insistió. -Jose, anda, gírate y vamos a hablar que se que estás despierto. En ese momento yo me gire y mire a Eva un tanto avergonzado. Eva volvió a sonreír y me dijo: -Vamos a hacer una cosa, si en realidad no me estabas mirando no tendrás la polla tiesa, ¿no? -¡Pues claro que no! ¡Que te has pensado! Sin darme tiempo a reaccionar mete la mano debajo de las mantas y me engancha la polla -¡Lo sabia!… ¡Será cerdo…! ¡La tienes dura! -¡Déjame en paz! ¡Es por el calor! -Si, si, por el calor…

En ese momento Eva se levantó y se fue a su habitación riéndose. Yo me quedé más rojo que un tomate, la polla tiesa y avergonzado. No podía dormir y decidí comportarme como un cobarde, me fui al mueble bar, cogí la botella de JB y me decidí emborracharme para ver si con la cogorza me quedaba dormido más rápido. Empecé a beber, cada vez más hasta que a los 30 minutos ya casi no me tenía ni en pie. Era las 5:30 de la mañana y estaba en el sofá riéndome yo solo de a saber que tontería que se me estuviese pasando por la cabeza. Con el jaleo que estaba armando Eva se levantó. Al verme en ese estado se me acercó y me dijo:

-Jose, ¿estás bien? Has bebido mucho. -Claro que estoy bien, tengo la polla tiesa pero estoy bien, jajaja Eva sonrió y se acercó a mí. -La polla, ¿la tienes así por mí? Me armé de valor y le dije: -Pues si, ¿que pasa?, que tú cuando hace mucho que no follas ¿no te pasan esas cosas? -Hombre, pues no, por lo menos no con mi hermano -Ya hace tres meses que no follo, hace calor y he bebido mucho, es normal que se me ponga la polla tiesa si veo a una tía.

-Mira, hacemos una cosa, yo te ayudo a solucionar ese problemilla y tú a cambio harás lo que yo te pida, ok? Cuando Eva me dijo eso casi se me salen los ojos de las órbitas, ¿mi hermana estaba hablando de darme sexo? -¿Pero que estas diciendo? ¿Has bebido tú también o que? -Bueno, si no quieres olvídalo…

-No, no, no, yo no he dicho que no quiera, solo que quiero saber si estas segura de lo que dices En ese momento Eva empezó a acariciar mi polla suavemente por encima del pantalón, yo estaba muy excitado y nervioso al mismo tiempo, ella se mordía el labio inferior y no retiraba la vista del bulto que aparecía por debajo de mis pantalones. -¿Te gusta? -si, mucho.

Eva siguió acariciando y poco a poco metió la mano por debajo del pantalón, sin bajarlo, yo solo veía como había una mano por debajo de mi pantalón, moviéndose arriba y abajo, tenía la mano muy caliente, parecía que me iba a morir de gusto.

-José, quítate la camiseta Yo obedecí y me puse más cómodo en el sofá para que pudiera acceder a donde ella quisiese más fácilmente.

Eva me bajó el pantalón, y se quedó mirando mi polla, no es muy grande, mide unas 17,5 cm. Pero tiene el suficiente tamaño como para poder hacer gozar a cualquier mujer dispuesta a ser follada. Siguió haciéndome la paja, yo me recosté sobre uno de los cojines del sofá y cerré los ojos para disfrutar más.

De repente noté algo cálido que recorría todo el tronco de mi polla y al momento un agradable calor en todo el glande. Abrí los ojos y allí estaba ella, Eva me estaba chupando la polla. Casi me corro en ese mismo momento con el espectáculo que tenía ante mis ojos. Eva me chupaba la polla y al mismo tiempo con una mano me pajeaba y con la otra se la había metido por debajo del camisón y se estaba metiendo un dedo en el coño.

En ese momento se levantó y se quitó el camisón, estaba desnuda, tenía los pezones duros, y me estaba sonriendo, se me acercó y puso una de sus tetas a la altura de mi boca. Yo en ese mismo momento empecé a chupar el pezón, al principio solo daba besos, luego con la punta de la lengua y luego pequeños mordiscos alternados con succiones y toques de lengua en el pezón, ella tenía los ojos cerrados, me tenía la polla agarrada y no paraba de subir y bajar la mano. Le dije que quería que me la siguiera chupando y se sentó encima mío, al revés, con su coño encima de mi cara. Ella estaba tan caliente como yo, los dos estábamos deseando follar, noté como empezaba a chuparme la polla otra vez y yo empecé a juguetear con su parte interior de la pierna con mi lengua.

Tenía el coño depilado, empecé a acercarme a sus labios, los besé suavemente de arriba abajo, comencé a jugar con mi lengua por su clítoris, estaba muy hinchado y Eva ya hacía un rato que había empezado a gemir mientras no paraba de chuparme la polla. Yo estaba en la gloria, mi lengua había empezado a moverse más rápidamente y Eva empezó un rítmico movimiento de caderas acompañando a mi lengua para que entrara cada vez más dentro.

Yo ya no podía más y le dije a Eva que me iba a correr, en ese momento se metió la polla hasta el fondo de la garganta y aceleró su movimiento de mete saca. Ya no pude aguantar más y me corrí en su boca mientras sentía como se contraían los músculos de su coño. Eva también había tenido un orgasmo.

Eva se giró y se tumbó en el sofá a mi lado, me abrazó y me dijo: -¿Has visto que facil era? Solo tenías que decírmelo y yo te ayudaba a acabar… -Me ha gustado mucho, hacía mucho tiempo que no me comía la polla así -pues recuerda tu promesa, ahora tienes que hacer lo que yo te pida -dime, ¿que es lo que quieres? -Quiero que me folles, quiero que vuelvas a correrte dentro de mi.

Me incorporé como pude debido a mi estado de embriaguez, me puse encima de ella y empecé a besarle el cuello, mi cuerpo estaba pegado al suyo, los dos estábamos sudando, fui bajando poco a poco, le empecé a besar el pecho, me entretuve en los pezones, me encantaban sus tetas, eran perfectas, me encantaba ver como se retorcía de placer mientras chupaba los pezones.

Seguí con la lengua trazando un camino de saliva por su vientre, hasta llegar a su coño, otra vez tenía muy hinchado el clítoris, el cual yo empecé a dar pequeñas lamidas suavemente para poco a poco seguir un poco más fuerte, con los dedos me ayudé para separar sus labios, ella estaba muy mojada, yo cada vez tenía más dura la polla.

Con la lengua la estuve penetrando mientras con un dedo previamente humedecido con su propio flujo jugueteaba con el clítoris. En ese momento su espalda se arqueó, cada vez gemía más fuerte y me cogió del pelo apretando mi cara contra su coño.

Aceleré mi movimiento de lengua y tuvo otro orgasmo, en ese momento me levanté e introduje mi polla de un empujón. Empecé a meterla y sacarla rápidamente, solo quería follar, follar y correrme dentro de mi hermana, me estaba haciendo gozar como un loco, allí estaba yo, borracho, desnudo, encima de mi hermana que también estaba desnuda y los dos follando como locos y muriéndonos de placer.

Aceleré aún más el ritmo y me pegué a su cuerpo para poder besarle el cuello, ya notaba como mi polla se hinchaba esperando soltar un nuevo cargamento de semen con destino al interior del coño de Eva, Eva me miró a los ojos fijamente, ella también deseaba que me corriera, me hizo una gesto con la cabeza y noté como ella se estaba empezando a correr, eso hizo que me sobre excitara y yo también me corrí en ese momento.

Tras el orgasmo me dejé caer, y ella me abrazó y me comenzó a acariciar la espalda mientras me dijo al oído:

-Me ha encantado, no esperaba menos de un chico de 24 años, espero que se repita.

Me guiño un ojo, me besó en la boca y tras yo levantarme, se fue a la ducha a limpiarse el sudor. Fue el mejor orgasmo de mi vida.

Autor: [CroNNo]