viernes, 13 de diciembre de 2019

La pérdida de la inocencia

Esta es la historia intimista, personal y real, aunque increíble, de cómo sin saberlo perdí mi virginidad a manos de mi prima Noelia.

Por aquel entonces yo contaba con 17 años recién cumplidos, y de la vida no sabía nada. Era un niñato, más inocente que una mosca y tímido. Claro está, mi vida sexual era inexistente y solamente quedaba al descubierto algunos días cuando me levantaba con los calzoncillos húmedos de algo pringoso o cuando se me levantaba la polla por algún motivo que aún desconocía.

Y en esto entra mi primita, Noelia, la más pícara de las mujeres, que me abrió la puerta al mundo de los juegos adultos (por cierto bastante mejores que los de los niños).

Noelia tenía por aquel entonces 25 años, era (y es) morena, con ojos castaños, 1″73 de altura, con el peso justo para su altura, pechos del tamaño de una mano, culo bonito en forma de corazón, en general, un cuerpo esbelto y ligero.

miércoles, 27 de noviembre de 2019

Somos pareja con mi hermana

Capítulo I – Problema localizado
Me llamo Xavi tengo 36 años y hoy hace dos que mi mujer fue a vivir con un informático gordito con aspecto inofensivo. El muy mosquita muerta vino a casa a explicarle un programa de banca electrónica y se la tiró ahí mismo, en mi casa, en la mesa de mi ordenador y con mi perro mirando. Cuando mi mujer me dejó no pude afrontar solo el pago del alquiler, así que le propuse a mi hermana Lourdes que se viniera a vivir conmigo.
Ella vivía sola y le costaba mucho llegar a fin de mes, así que aceptó y en unos días la tenía instalada en casa. La verdad es que era maravilloso volver a vivir con alguien, además ella siempre había sido un terremoto no paraba de hablar, de poner música, de hacer ruido. Era fantástico sentir vida en casa otra vez, definitivamente era la distracción que necesitaba. Ella a sus 32 años de entonces no había tenido una vida fácil. Había estado liada con un hombre casado desde muy jovencita. El individuo era conserje de unos edificios de oficinas y hacía un año que había dejado tirada a su mujer y a mi hermana por una administrativa rubita muy mona.

martes, 23 de abril de 2019

Mi hermano piloto, yo auxiliar de vuelo

Tengo 24 años. Me llamo Elisa y vivo en un chalet en la playa, cerca de la frontera española con Andorra. Provengo de una familia acomodada. Mis padres eran pilotos comerciales, pero hace 2 años que murieron en un viaje a Sri Lanka. Solo tengo un hermano aquí; Se llama Gabriel y tiene 5 años más que yo; Casi 29…

Nuestra historia comenzó hace un par de meses…en una noche normal de nuestras rutinarias vidas…Gabriel es piloto, como lo eran mis padres, pero trabaja en una aerolínea española regional, así que todos los días vuelve a dormir a casa. Yo, soy azafata de vuelo y suelo coincidir bastante con Gabriel, ya que volamos para la misma compañía. Esa noche, ambos coincidimos en casa. Llegamos cansados. Él un poco malhumorado como siempre, desde que su chica le había dejado hacía 1 mes, y yo algo enfadada porque Javier, mi exnovio, no dejaba de mandarme mensajitos al móvil para que volviéramos…

Verano para recordar con mi hermana


Muchas veces uno no se da cuenta de lo que tiene en casa hasta que se da de narices con ello. En casa somos dos hermanos, yo de 26, y mi hermana de 18.

A sus 18 media ya mas de metro ochenta y tenía unas tetas grandes, pero sin ser excesivas, vamos de un tamaño que no cabe en la mano pero que no se desborda, perfectas.

Esas vacaciones de verano cambiaron mi forma de mirarla al verla en bikini, recuerdo su imagen del verano anterior, una joven normal y corriente. Este verano parecía una diosa del deseo. No podía quitarme su imagen de la cabeza. Son cosas que suceden sin mas. Recuerdo que el verano anterior se subía a caballito mío en la piscina y no iba la cosa más allá de un simple juego, este verano volvió a intentarlo pero para mí era diferente, el sentir esos pechos en mi espalda y ese chochito en mi nuca me ponía a mil. Para ella seguía siendo un juego, o eso creía yo. Es por ello que comencé a intentar evitar estas situaciones, más si estaban mis padres cerca, pues son de una moral muy estricta, sin ser beatos, pero manteniéndose a parte de los temas sexuales, la verdad es que mi educación sexual a surgido a golpe de revista y charlas con mis amigos.

Polvazo a primera vista


Hola gente, hacia mucho que no escribía nada pero he encontrado un rato para volver a mis mejores historias. Espero que os guste tanto como a mi cuando la realicé. Para ti Eva.

La noche no prometia para nada ya que despues de cenar sali con un amigo y su hermano a tomar algo e irnos prontito a casa. Despues de tomarnos unas cervezas el destino hizo que su hermano se encontrara con 3 chicas que conocía de un antiguo trabajo. Isa, Nuria y Ana. Isa es pequeñita con gafas y vestida con una faldita muy apretada, un top igual de apretado que al tener las tetas pequeñas, no le hacia falta llevar sostén. Nuria es algo mas alta que yo, unos pantalones largos negros y una blusa con trasparencias, pelo negro y largo y mona de cara. Y la tercera de las tres Ana. Una rubita con pelo liso y corto. Es un poco mas gordita que sus amigas, pero eso hace que su culo dibuje un par de nalgas que quitan el hipo. Las tetas bien grandes, talla 100 como minimo. Todo eso vestido con ropa bien ceñida que hace que las curvas de su cuerpo sean mas visibles.

Mi prima y su amiga I



Hola amigos, lo que os voy a contar ahora ocurrió hace mas de diez años cuando tenia 18 años. Por aquel entonces yo ya sabia todo lo que había que saber del sexo pero aún no había podido experimentarlo, y de eso se encargaron mi primita y una amiga suya en un mes increíble en mi pueblo.

Empezaré la historia describiendo a mí y a mi prima y su amiga un poco. Yo por aquel entonces media 1,60 m era moreno con el pelo largo, de constitución delgada y hacia bastante deporte. Mi prima tenia 20 años, era morena con el pelo liso castaño y por la nuca. Medía aproximadamente como yo y de cuerpo estaba buenísima, delgada con unos pechos enormes y un culito increíble, gracias a que hacia un poco de ballet. Su amiga de la misma edad era la típica rubia de 1,70 m. pelo largo y rizado, ojos verdes penetrantes y aunque tuviera unos pechos normalitos el resto de cuerpo estaba para enseñarlo en las revistas de moda.

Aquel verano nos quedamos los tres solo en mi pueblo ya que mis tíos y mis padres se habían ido de crucero por el caribe, y como era de esperar a nosotros no nos invitaron, además como ya éramos bastante mayorcitos se fiaban de dejarnos solitos. Seguro que no se esperaban lo que iba a pasar, dejando a tres jóvenes con las hormonas totalmente revolucionadas compartiendo una misma casa.

Tarde de verano con mis primas

Esta historia es verídica y me ocurrió hace ya algunos años. Lo cierto es me encantan los relatos que aquí aparecen y los disfruto mucho, es por eso que quiero hacer a todos y todas participes de mi experiencia en aquellos años.

Me llamo Javier. Cuando todo esto ocurrió, yo debía tener 19 años y fui a casa de mis primas, con las que siempre he tenido mucha relación y confianza desde que éramos muy pequeños. Pasábamos juntos muchos fines de semana en la piscina y nuestros padres, además, trabajaban juntos en la misma empresa. Mis padres me dejaron allí por la mañana y me recogerían por la noche, ya que ellos se iban con mis tíos a una fiesta de despedida de un compañero de trabajo que se jubilaba.

Mi primas son Vane, la mas pequeña, que tendría unos 18 años y Desi, la mayor, que por entonces tendría unos 20.

sábado, 20 de abril de 2019

Primas

Un verano muy cachondo, el más intenso de su vida en compañía de dos primas
Empezaré este relato describiendo un poco mi situación y la del resto de personas aquí mencionadas. Deciros que esta historia es real, tan solo cambiaré los nombres de las personas y de los lugares, para así evitar problemas.
Mi nombre es Jose, actualmente cuento con 27 años, mido 180cm, y peso 80 kgs, me encanta el deporte, en especial la natación y el ciclismo, por lo que estoy bastante bien de cuerpo, gracias también a que me cuido en las comidas, no fumo y solo bebo alcohol los fines de semanas, de los cuales algunos de ellos, acabo bastante mal. Vivo en el sur de España. Trabajo en una empresa de muebles de oficina, yo trabajo en el departamento comercial y alguna que otra vez he ayudado a montar los muebles en oficinas.

lunes, 11 de febrero de 2019

Me sedujo mi hija

A los pocos días de haber pasado un fin de semana con mi hijo en un hotel, una noche me llamó él por teléfono, me dijo que estaba cenando con su hermana y que me pedía permiso para contarle nuestra aventura sexual. Le dije que sí, pero que solo le contara lo nuestro, sin decirle nada de mis otras aventuras, que eso lo reservaba para decírselo yo personalmente a ella en alguna ocasión.
A la mañana siguiente, muy temprano vino mi hija a casa, yo estaba todavía acostada y se vino al dormitorio, se desnudó y se acostó conmigo. No le di importancia, porque eso lo hacía con cierta frecuencia, las dos desnudas en la cama, contándonos nuestras cosas, pero sin apenas tocarnos. Pero ese día se le notaba algo diferente, la veía muy contenta y nerviosa a la vez, claro….con lo que su hermano le contó la noche anterior, era lógico.

entre revistas y peliculas porno

Empecé a ver películas porno cuando aún no me había iniciado en el sexo. Comencé a masturbarme a temprana edad, pero no fue hasta los 18 años que experimenté mi primer orgasmo mientras estaba sentada en una silla y me miraba en el espejo abierta de piernas y viendo brillar mi rajita de gusto.
Un día vi a mi padre esconder algo en el armario y decidí mirar cuando no estuviera. Resultó ser una revista pornográfica llena de escenas de sexo, mamadas, enculadas y relatos. Que gran enseñanza me hizo mi padre sin saberlo!
Esperé al siguiente día a quedarme sola. Ahora con la información de primera mano, sentí la necesidad imperante de ser taladrada por algo que tuviera el tamaño de una polla mientras me masturbaba, así que busqué en la caja de herramientas una que tuviera un buen mango.

domingo, 10 de febrero de 2019

Celebraciones familiares 2

Puedes leer la primera parte de este relato: Celebraciones familiares 1.
Resumen: Cuando Carla descubrió a su tita Piedad mamándole la polla a Roberto prendió entre sus piernas un meloso y desconcertante ardor.
Unos meses antes, había tenido lugar la boda de Sebastián, el primo de mi mujer. A pesar del banquete algunos quedamos hambrientos (ver Celebraciones familiares 1: La Boda).
Hagamos un repaso de las personas que de una forma u otra intervinieron en aquellos emocionantes días de invierno.

Celebraciones familiares 3: El cumpleaños

Resumen: A sus 45 años, cuando en medio de una discusión su hija le dice que es una amargada que no disfruta de la vida, María Luisa se da cuenta de que no puede seguir perdiendo el tiempo.
Hay un refrán que dice “Cría fama y échate a dormir” y este refrán se puede aplicar a otros tipos de éxito y reconocimiento, como el sexual. Si además se te da bien arreglar cosas, las mujeres no te dejarán en paz.

Celebraciones Familiares 1

Resumen: Ser un manitas me generaba no pocos compromisos familiares. Es en cierto modo lógico y comprensible, cuando se corre el rumor de que tienes buena herramienta y sabes cómo utilizarla. La primera en necesitar mi ayuda fue Piedad, la prima tetona de mi mujer.
Este relato está basado en el relato “La Boda” que leí hace poco en esta página web. Al leerlo me recordó algo ocurrido hace sólo un par de años, cuando una fantasía que me había perseguido desde hace años se hizo por fin realidad.

Mi hermana, mi amiga, mi novia, mi amante

Desde siempre mi hermana y yo hemos mantenido una relación muy fuerte, más allá de cualquier convencionalismo. Hemos crecido en una familia de clase media-alta y nuestra educación aunque religiosa y fuertemente arraigada nos han impedido reforzar nuestro cariño y el amor que profesamos la una por la otra.

Mi hermana y yo somos de edades muy cercanas, ella un par de años mayor que yo, y somos muy parecidas físicamente.

Todo lo que voy a relatar a continuación es totalmente verdad y ha ocurrido y sigue ocurriendo en la actualidad.

lunes, 14 de enero de 2019

Hijas de las Calles.

Lo peor fue cuando al guarro de mi marido, al que por otra parte quiero mucho, se empeñó en pedirme el juego de otra mujer, tal vez una mujer de la calle para alimentar sus sueños eróticos. De una forma generosa y tal vez con algo de morbo por mi parte, al final cedí a sus pretensiones.

Debo deciros que esta aventura ocurrió al principio de los años ochenta. Todavía sin el síndrome del S.I.D.A. y en pleno destape. Llevábamos casados cinco años y queríamos conocer todas las posibilidades del amor físico y del placer, no me arrepiento de lo sucedido, aunque no lo volvería a repetir.

Una tarde y cuando paseábamos por un barrio de mala fama, el me llevó por unas callejas llenas de putillas en cada esquina. El estaba caliente, muy excitado, diciéndome guarradas al oído. Me pidió permiso para vacilar un poco a las lumis, se lo concedí. Se alejó un poco de mí y se dedicó a pararse ante las chicas. No perdí el tiempo y quise complacerle ya que a mi se me daban mejor las compras que a él.